Ante todo quiero pediros disculpas por haber tardado tanto en hacer la entrada, pero luego entenderéis el porqué.
Ayer salimos rumbo a la ciudad vecina cerca de las 14:00, con la hora justa justa. Paramos unos minutos para comer un bocadillo y seguimos la ruta. Llegamos al hospital a las 16:30 y teníamos la cita a las 16:45. Encima, se me puso la barriga regular y tuve que ir corriendo al baño. No quise beber mucha agua porque no sabía cuánto tiempo estaríamos esperando para la transferencia, así que una vez en la sala de espera y sabiendo que ya nos iba a atender la embrióloga bebí un poquito más. Enseguida nos pasó a la sala contigua y nos informó de cómo iban nuestros luchadores.
Nos comentó que el tipo A que estaba rezagado hoy daba signos de estar parado, se había estancado en 6 células, cuando debía estar ya en 8, así que lo descartaban. El otro A había pasado a ser B porque le habían aparecido restos, no estaba limpio del todo, pero que estaba en 8 células muy bien dividido. El otro B de ayer seguía igual de bien con sus 8 células y el C estaba entre C y D.
Yo le propuse ponernos el B que estaba bien y el C porque no quería perderlo, ya que me habían dicho que ellos no congelan este tipo de embriones porque suelen dar problemas a la hora de la desvitrificación. También nos dijo que eso puede pasar con cualquier tipo, que el porcentaje de supervivencia en la desvitrificación es de un 90% pero que puede pasar. El otro B lo hemos congelado.
Nos preguntó si no estábamos de acuerdo en transferirnos los 3 y les dijimos que no. Ella nos comentó que cuantos más embriones te pongas más probabilidades hay de embarazo, pero no porque haya el doble de oportunidades de que se implanten sino porque cada embrión envía una serie de señales al endometrio que favorece la implantación ayudándose unos a los otros.
Le pregunté una serie de dudas que tenía acerca de si se ponían los dos y uno se paraba si eso podía afectar al otro y nos dijo que no, que se reabsorbe pero que teníamos que pensar que iba a salir bien. También me comentó que habiéndome quedado ya embarazada de manera natural y de manera rápida tendría más posibilidades de conseguir el embarazo con FIV.
Después de la conversación, pasamos de nuevo a la sala de espera y volví a beber agua y al ratillo nos llamaron para entrar a la zona de quirófano/punción/transferencia. Nos dijeron que teníamos que ponernos guapos con los patucos, gorros… y así lo hicimos y luego (cómo no!) nos hicimos la merecida foto. Mientras yo estaba en el potro, mi marido no paraba de darme besitos en la cabeza.
Al ratillo entró el gine seco que tanto coraje le da a mi tocaya seguido de otro gine súper joven y activo. El sequillo me plantó una luz en el toto que me daba un calorcico que pá qué y el joven se dispuso a hacerme la eco abdominal. Le pregunté si estaba llena la vejiga y me dijo que lo justo para la eco (bien!), pero nada más empezar dijo:
Uy, estás un poco hiperestimulada!
En la eco se veía algo de líquido y los ovarios inflamados. Y enseguida me giré hacia la embrióloga y le recordé lo de mi opción de ciclo natural y eso seco me dijo:
Tienes un poco, vamos, lo normal en una mujer a la que le han estimulado! Si no lo tuvieras es porque no te hubiesen sacado ningún óvulo. A ver si te voy a tener que decir lo mismo que le dije el otro día a una muchacha: si quieres no te hago la transferencia.
Les pregunté qué podía hacer, que desde el día anterior tenía muchas molestias y me dijeron que si seguían me tendría que ir a urgencias directamente.
También me dijeron que hay muchas posibilidades de hiperestimulación tardía y que si se producía embarazo las hiperestimulación podría ser mayor y, en el caso de un embarazo múltiple, aún más, pero la embrióloga le dijo que me habían puesto el mejor y el peor y entonces el seco dijo:
Ah, bueno!
Y procedimos a la transferencia:
Me metieron el espéculo, mejor llamado gato chochero porque se nota cómo se va abriendo lentamente el cuello del útero y después vino la embrióloga con la cánula que me volvió a hacer dañillo, pegué un saltllo de la molestia. Ese momento que debía ser precioso lo viví con un sentimiento extraño, estaba preocupada por lo de la hiperestimulación y además, como la auxiliar que se encarga de todo no estaba, ellos tuvieron que improvisar sobre la marcha y casi ni vemos a nuestros bebés entrar. Al final nos dijeron:
mirad, en esa gotita están.
El gine joven se fue corriendo y el seco empezó a quitarse los guantes y la embrióloga se fue a comprobar que no se habían quedado en la cánula. A todo esto que el seco se acordó de que no me había quitado el espéculo y comenzó a hacerlo súper rápido y, cuando él pesanba que ya había salido, noooo, se me había quedado enganchado. Pues bien, justo en el momento que lo estaba sacando la embrióloga dijo:
todo perfecto!
Menos mal, si se hubiese quedado alguno dentro qué???
Bueno, ahí me dejaron, sin papel para limpiarme ni nada así que me limpié con la sábana. Nos quedamos un buen ratito allí con las piernas en alto y me sentí un poco triste por haberme hecho la transferencia con la hiperestimulación porque a lo mejor ese líquido no era bueno.
A todo ésto, en la pantalla que teníamos enfrente pasaban las fotos de nuestros dos embrioncitos.
Al rato entró de nuevo la chica de recepción y me explicó todo lo que debía hacer con la hiperestimulación. Nos habló tan claro y tan bien que enseguida me repuse de mi sensación. Le pregunté si ese líquido podía ser malo y me dijo que nooooo, que ese líquido estaba en la barriga.
Ufff, menos mal! Me quedé mucho más relajada.
Nos explicó que debía estar en reposo absoluto, y nos dio las siguientes indicaciones:
- debo estar tumbada el máximo tiempo posible para intentar orinar más
- tengo que beber muchos líquidos
- hacer una dieta hiperproteica
- si el dolor en vez de ir a menos va a más, a urgencias y que me hagan todas las ecos que necesite
Quiso darme la baja pero le dije que no, que prefería estar en reposo hasta el lunes e intentar ir a trabajar ese día, pero que si veía que estaba molesta, ya sí que me cogería la baja.
Después echamos un buen ratico hablando. Es más maja que nada!
Al ratillo fui a hacer pipí e hicimos el viaje de vuelta.
He dormido súper bien, de un tirón y al levantarme he caído en que hoy ya era mi primer día después de la transferencia. Ya tenía a mis dos peques conmigo. Es una sensación extraña porque sabes que están ahí pero no sientes nada, y deseas con todas tus fuerzas tener algún síntoma.
Llevo toda la mañana tumbada, mi madre se ha venido a pasar la mañana conmigo y se quedarán a comer para que no esté solica. No le he comentado nada, sólo que debo estar en reposo para «que no se me caigan». No quiero preocuparla. Cuando estoy tumbada me molestan los ovarios sólo un poquillo pero si me siento sí que los noto más. Toñi me ha dicho que debo pesarme y medirme la cintura todos los días para ver si va en aumento o no, así que eso he hecho, por ahora me he medido la barriga pero no he ido a pesarme, ahora lo haré cuando vuelva a ir al baño. Me va a tocar tirar de aquarius, me ha dicho que mínimo 1,5-2 litros al día… Así que me lo compraré sin azúcar.
Hoy estoy muy contenta, deseando que pasen los días y las molestias vayan a menos, que pueda salir a la calle y andar y pasear mi felicidad. Hemos conseguido llegar a este momento, con dos súper luchadores que son preciosos (qué voy a decir yo!). Sé que no va a ser fácil estar tantos días en reposo, pero voy a luchar como nunca.
Mi marido y yo hemos decidido actuar como si estuviésemos embarazados, igual, con la misma ilusión que vivimos nuestros anteriores embarazos y en eso estamos. Esta mañana, al irse él a trabajar, me ha dado un pedazo de abrazo y besitos en la barrigota. Es la persona más maravillosa que puedo tener a mi lado!!!!
Os mando muchos besitos a todas, no sé cada cuánto podré entrar en el blog porque si viéseis la postura que tengo ahora para escribir os daría la risa, ajajaj, pero intentaré manteneros informadas.
Un besazo de parte de los 3!!!!!!
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